Las féminas españolas consiguieron sacar una ventaja de cuatro puntos, en el último cuarto para alejar el marcador de las húngaras, a pesar de haber estado muy igualado durante todo el encuentro. La portera de la selección, Laura Ester fue clave para evitar el gol del empate en los últimos cinco segundos del partido.
Este sábado, las de Miki Oca jugarán la final contra Rusia, para intentar llevarse el oro a casa, como ocurrió la última vez en 2014 y casualmente también en Budapest.
Parecía que las de Miki Oca llevaran todo el europeo esperando el último cuarto contra Hungría. Una lluvia de goles iba a calar la portería húngara para poner a España hasta con cuatro goles de ventaja, a falta de tres minutos. Las españolas tenían medio billete para la final.
Sin embargo, Hungría se vino arriba, llegando a recortar tres goles a las españolas. Pero esta vez ni el palo, ni la mala puntería le iba a evitar el gol de las húngaras. Fue Laura Ester con una parada agónica a falta de 5 segundos quien, finalmente, presentó los pasasportes de las españolas para la final contra Rusia, según informa RTVE.
No vaticinaba un final así el partido desde el primer tiempo. Tuvo que intervenir el VAR para darle el primer gol a Annie Espar, tras un despeje de la portera húngara, cuando la pelota estaba dentro. Laura Ester, clave desde el primer tiempo, también demostró reflejos, repeliendo cuatro disparos húngaros.
Faltaban dos goles para España que llegaron con la misma firma, la de Roser Tarragó. Sin embargo, las húngaras iba a cerrar la primera parte con el tecer gol que dejaba el marcador en tablas a 11 segundos para el descanso.
Se antojaba un partido complicado para las de Miki Oca al comienzo del segundo parcial. Las húngaras no paraban de atacar y plantar una buena defensa. Pero no iban a aguantar así los ocho minutos. Annie Espar redondeó su Hat-Trick con los dos goles que le faltaban, para darle la vuelta al marcador (4-5). No fueron a más los goles de las españolas por culpa de los palos (cinco en total al descanso).
No se lo querían poner fácil las españolas a Hungría, que se empezaban a hacer más fuertes. Era ahora cuando los palos empezaban a aparecer para frenar los goles de las húngaras, que pudiendo ponerse por encima, sólo anotaron tres. Los dos goles de España sirvieron para que el marcador no pasara de siete para ninguna de las dos selecciones. El partido se decidiría en el último cuarto.
