jueves. 25.04.2024

"¿Tú sabes cómo fecundan los gallos a las gallinas?", "Esta lo que necesita es que le metan una guindilla por el culo", "Eres una gorda". Son algunas de las frases que integran el nuevo libro de la presentadora de Movistar LaLiga Danae Boronat, "No las llames chicas, llámales futbolistas", en el que se narran los presuntos desprecios que dirigía a las futbolistas de la selección española Ignacio Quereda, entrenador de la plantilla durante 27 años, entre 1988 y 2015. 

Dentro del libro, al que ha tenido acceso El Mundo, la periodista catalana recoge los testimonios de numerosas ex jugadoras que denuncian los maltratos psicológicos recibidos por quien fuera su seleccionador. Entre ellos, figura el triste episodio que sufrió la ex guardameta Roser Serra: "En la Eurocopa de 1997 nos reunió y, con su actitud de chulo, porque era un chulo, delante de todas me dijo: 'Mira, Roser, hay una chica más tonta que tú', y nos enseñó un vídeo de una portera que cometió un fallo. Me dejó por los suelos. Fui a hacerme la maleta para irme. No le aguantaba más".

A estas chocantes declaraciones, se le añaden las de ex jugadoras que sufrieron en sus carnes el machismo y el despotismo de un seleccionador protegido bajo el manto de la Federación, presidida por aquel entonces por Ángel María Villar. Jenni Hermoso, Vicky Losada, Irene Paredes, Alexia Putellas o la ex capitana Vero Boquete ofrecen también su versión de los hechos: "Lo denunciamos, pero no tuvimos apoyo. Era un calvario ir a la selección", resume Pilar Vargas, la primera mujer titulada para ejercer el cargo de seleccionadora nacional.

Tras caer eliminadas del Mundial de Canadá de 2015, las jugadoras remitieron una carta a la Federación firmada por las 23 integrantes de la plantilla en la que reclamaban la dimisión de Quereda, no tanto por sus abusos sino por la insuficiencia en la preparación a la hora de afrontar una cita mundialista. Lograron su objetivo después de que el ex seleccionador presentara su dimisión, pero el daño ya estaba hecho. 

Ahora, "No las llames chicas, llámales futbolistas" sirve de altavoz para denunciar las continuas humillaciones de un entrenador ineficiente en el ámbito deportivo, aferrado a un cargo del que parecía inamovible y que además se propasaba con sus jugadoras. Duró 25 años en el puesto, pero claro, como dicen algunos, eran otros tiempos.

Varias jugadoras denuncian las humillaciones del ex seleccionador nacional de fútbol:...