Mireia Belmonte ha vuelto a entrenar en el CAR de Sant Cugat en doble sesión de trabajo. Cinco horas de agua después de haber estado, como todos los nadadores, casi 9 semanas en el dique seco. “Lo que hemos hecho en este confinamiento es mucho cardio, mucho 'core', muchos abdominales y también visualización, imaginarnos en el agua, imaginarnos en nuestra mejor prueba”.
La campeona olímpica ha charlado con el programa 'Objetivo Tokio' en el inicio de la pretemporada olímpica. “Hay que recuperar un poquito la forma, creo que no va a ser cuestión de días ni de meses. Esto va a ir para largo, ya que hemos estado mucho tiempo sin nadar así que ahora con la mente en Tokio”. “Hay que ganar mucho aeróbico, mucha velocidad y eso son muchos entrenamientos”.
Por primera vez los nadadores entrenan sin un objetivo claro, al suspenderse todas las competiciones de este 2020. “Es una sensación muy extraña entrenar sin saber exactamente para qué competición entrenas. Sabes que entrenas para Tokio pero para Tokio todavía queda más de un año, sin una competición cercana importante donde te puedas medir y saber cómo va la preparación”.
España fue el primer país europeo que cerró las piscinas y es de los últimos en abrirlas: “Muchas de mis rivales han seguido entrenando en este confinamiento, ya que en otros países les han permitido tener una piscina para entrenar y un gimnasio”.
"La vacuna nos daría seguridad a todos, no solo a los deportistas"
En Tokio defenderá su título de 200 mariposa, con 30 años cumplidos, ante una generación mucho más joven: “Lo que hay que hacer es entrenar y mirar, cuando empiece el calendario, el ranking de todas las nadadoras y a partir de ahí ver que rivales son las más peligrosas para Tokio”.
Ese es el objetivo principal, ir a Tokio y estar en lo más alto pero todo está en el aire. "La vacuna nos daría seguridad a todos, no solamente a los deportistas. Vas un poco más seguro a la hora de ir a la villa olímpica donde hay muchísimos deportistas", explica.
La natación en Tokio comenzará el primer día pero por la tarde. Las finales se disputarán por la mañana, como en Río. Esto permitirá a Mireia cumplir otro sueño, desfilar en la Ceremonia de Inauguración: “en los tres Juegos Olímpicos en los que he estado no he podido ir a ninguna inauguración”. Además, si es como abanderada mejor “sería un honor llevar la bandera de mi país, siempre he pensado que es el máximo honor que puede tener un deportista en unos Juegos Olímpicos”.
