El Gran Circo arranca este fin de semana con la disputa del Gran Premio de Baréin, el cual nos venía teniendo acostumbrados a ser la segunda cita del campeonato durante los últimos años, pero con el aplazamiento de la carrera de Melbourne hasta noviembre, las primeras vueltas de la Fórmula 1 2021 se realizarán en Sakhir, por primera vez desde la temporada 2010.
La 72.ª temporada del Campeonato Mundial de Fórmula 1 constituirá un mundial récord en cuanto a extensión se refiere, con un total de 23 carreras, con las novedades de Yeda, Portimao e Imola, que vuelve al campeonato. Los pilotos, y sobre todo los ingenieros, deberán poner todos sus sentidos en sacar el máximo rendimiento posible a los monoplazas en un calendario tan apretado como es el de este año, que no dejará ni el margen más ínfimo para cometer errores.
En los monoplazas también se sentarán muchos pilotos nuevos, debutan en la máxima competición automovilística el japonés Yuki Tsunoda, elegido Rookie del Año de la temporada pasada de Fórmula 2; Mick Schumacher, campeón de F2 2020 e hijo de Michael, el heptacampeón y para muchos el mejor hombre en conducir un Fórmula 1 de toda la historia; y el ruso Nikita Mazepin, quien consiguió dos triunfos la pasada temporada en Fórmula 2 pero que ha visto su desempeño en la pista ensombrecido por protagonizar un polémico manoseo con una mujer en redes sociales.
La pareja formada por Vettel y Stroll promete ser una de las más refrescantes del año con un Aston Martin que luce, y esto es opinión personal, sinceramente espectacular. Habrá que ver el rendimiento del alemán, que deja Ferrari tras cinco años después de dos temporadas en las que el equipo dio muestras de encontrarse en un estado deprimido por la apabullante disposición de Lewis Hamilton de la mano de un Mercedes que desde que la F1 apostó por la tecnología híbrida, solo cuenta sus temporadas por victorias y que tiene todas las papeletas de volver a llevarse este mundial. Interesante será también comprobar la labor que realizará el equipo McLaren, que tras cosechar un más que decente tercer puesto en el mundial de constructores del año pasado ha fijado sus miras mucho más allá con un monoplaza que parece ser un candidato muy fiable a estar en los puestos de arriba.
Carlos Sainz, con su flamante fichaje por Ferrari y Fernando Alonso, que regresa a la F1 tras una ausencia de dos años, prometen ser dos claros alicientes para el público español. El madrileño parece dispuesto a pelear con Charles Leclerc por ser el primer piloto de la escudería italiana y así lo ha demostrado en los entrenamientos libres de este viernes, quedando cuarto casi cinco décimas por encima del monegasco. Alonso, por su parte, tratará de hacer lo que mejor sabe: arañar décimas de donde no las hay con un coche que no parece estar a la altura de las expectativas generadas por la vuelta del asturiano, que ya ha adelantado que lo mejor vendrá la temporada que viene con el reseteo de las normativas.
