Durante la celebración de los Premios Princesa de Asturias el Rey Felipe VI ha mostrado en su discurso la preocupación que le pesa respecto a la situación de España y su gran amenaza, la Pandemia.
Ha reconocido el mérito del pueblo español de estar dando "pruebas inequívocas de resistencia y entereza", mostrando su gratitud pero no olvidando que aún hay un largo camino por recorrer. Por ello apela a la conciencia social, explicando que lo que hace falta para salir adelante es un compromiso. "Un esfuerzo nacional, de entendimiento y de concordia".
Defiende también que habiendo personas que sufren en su día a día, todos han de unirse poniendo en el mismo saco talento y energía a fin de poder solucionar el problema que a todos afecta, por lo que todos han de unirse y no dejar que el esfuerzo hecho hasta ahora caiga en saco roto. Habla de que la acción española ha de basarse en "conducirnos con sentido del deber, con la mayor responsabilidad, y con la máxima integridad y rectitud, para que el interés nacional prevalezca y los intereses generales de los españoles sean nuestro norte y guía", incluyéndose a sí mismo.
El Rey, con emoción, ha recordado a "los miles de personas que han perdido la vida", especialmente a los profesionales de la sanidad y sus allegados. "Representan lo mejor de nuestra sociedad; el corazón de un país que en los peores momentos debe mantenerse unido y ser capaz de enfrentarse a los más graves problemas con responsabilidad, sentido del deber y civismo", ha afirmado.
Así, ha dicho que "esta crisis sanitaria ha puesto a prueba las capacidades de los Estados, ha mostrado sus debilidades y
carencias como también sus fortalezas e igualmente la trascendencia de los altos valores que deben regir la vida democrática". "Frente a tanta pérdida, tanta incertidumbre y tanto pesar, han renacido en nosotros también otros sentimientos y actitudes positivas que quizá en demasiadas ocasiones parecían adormecidos".
El Rey ha finalizado dedicándoles una mención a todos los premiados, concluyendo así su discurso y dando pie a su hija la Princesa Leonor.
