jueves. 28.03.2024

Abierta hasta el 14 de mayo en Casa Árabe (Samuel de los Santos Gener, 9), la exposición La perla azul, de Manuel Lama, muestra fotografías de Chauen, obtenidas en distintos viajes del autor a la ciudad rifeña. “Esta perla de infinitos matices azules -escribe Michael Zapke, comisario de la exposición- es lugar de visita de muchos fotógrafos como Manuel Lama, que no pudo resistir la tentación y el reto de plasmar su propia visión de la ciudad fundada en 1471 por Moulay Ali Ben Moussa Ben Racched El Alami. El nombre, Chauen, viene del idioma Tamazight, segunda lengua oficial de Marruecos y significa «cuernos», haciendo referencia a dos montañas en cuyas faldas se asienta la ciudad”.

La exposición, que forma parte de la 17º Bienal de Fotografía de Córdoba y que organiza Casa Árabe, puede visitarse de lunes a viernes en horario de 10.00 a 14.00 y 16.30 a 20.00 horas.

“Gracias a su particular forma de mirar y plasmar tanto situaciones costumbristas de vibrante contenido como impresiones de intensa calma -continúa Zapke- tenemos en la presente exposición el resultado de su trabajo en varios viajes al país vecino. Sus fotografías de Chauen dejan el margen necesario para percibir, explorar e interpretar las imágenes según su estado de ánimo. Desde la arquitectura del lugar a escenas cotidianas, nos lleva a experimentar tanto un plácido sosiego como la alborotada vida de un pueblo rifeño que durante siglos fue ciudad santa y prohibida para extranjeros, hasta el año 1920. Contemplando el collar de perlas fotográficas uno se queda «atónito como el lucero ante el horizonte celeste»”.

Desde la exposición que realizó como ganador del Premio Mezquita de Córdoba, uno de los más prestigiosos de nuestro país, Espacios Eternos en la Sala Orive del Ayuntamiento de Córdoba, cada una de las exposiciones de Manuel Lama (Cabra, Córdoba, 1952) ha confirmado la madurez de quien sabe perfectamente el tipo de fotografía que es intrínseca a su personalidad: de quien busca las imágenes donde sabe que las va a encontrar, porque son las que quiere y no otras.

Su fotografía no pone en duda la realidad, no la interpreta, sino que la muestra al espectador tal cual para que este la sienta parecida a como él la sintió en el momento de su realización. Y lo hace con todos los recursos que le ofrece el lenguaje fotográfico: se trata de plasmar la belleza de un lugar, su quietud, su ambiente, el equilibrio del color con las formas y volúmenes, el silencio... y hacerlo con absoluta sencillez. La cámara es una extensión de su forma de ver y entender la vida, de mirar dentro y fuera de sí mismo, y de percibir las emociones y los sentimientos propios y ajenos. Lo que él denomina «ver con los ojos, mirar con la mente y percibir con el corazón».

Con más de 100 premios, entre ellos el Premio Mezquita de Córdoba en 2011, tiene los títulos AFIAP y ACEF y varias participaciones en la Bienal de Córdoba. 

La exposición 'La perla azul', de Manuel Lama, en la XVII Bienal de Fotografía de Córdoba