Finalmente, la Gerencia de Urbanismo (GMU) no modificará el Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) para regular la ubicación de las salas de apuestas en el casco urbano, a pesar de lo aprobado en el Pleno de enero. El Ayuntamiento había establecido ciertas condiciones para estos locales debido a la presión vecinal por la ludopatía existente en la localidad. Pero estas no se podrán cumplir, ya que las competencias que regulan esta situación están residenciadas en la Junta de Andalucía.
Igualmente, Salvador Fuentes, ha informado de que el Ayuntamiento hará todo lo que pueda en materia de sensibilización y de formación sobre los riesgos de esta práctica.
Tras el Pleno de enero, el propio Fuentes elevó una consulta tanto a la Junta de Andalucía como a la Subdelegación del Gobierno para conocer el margen en el que podría la Gerencia de Urbanismo regular la cuestión. La respuesta es clara y señalan que es la Administración andaluza la responsable de regular la instalación de cualquier tipo de recinto dedicado al juego y las máquinas tragaperras en los establecimientos de hostelería.
“He hecho lo que he podido y he llegado hasta donde he podido”, reconocía Fuentes desde la Gerencia de Urbanismo. Por lo que ha decidido actuar en el ámbito preventivo e informativo.
A partir de ahora, es el Consejo Rector de la Gerencia de Urbanismo el que tiene que retirar la innovación del PGOU y estudiar si la moratoria actualmente existente se puede ampliar o no después de mayo.
