El consejo rector de la Gerencia Municipal de Urbanismo (GMU) de Córdoba aprobará, de manera urgente, la licitación de la obra correspondiente a la tercera y última fase de la remodelación de la avenida de Trassierra. El presidente de Urbanismo, Miguel Ángel Torrico, ha adelantado que el objetivo es licitar la obra tras su paso por el consejo rector, adjudicarla en otoño de este año y finalizarla antes del verano del próximo año, ya que el plazo de ejecución es de seis meses. El presupuesto asignado para estos trabajos es de 560.000 euros.
Esta tercera y última fase abarca 160 metros, desde Francisco de Toledo hasta Doña Berenguela, llegando a la rotonda que conecta con las estaciones de trenes y autobuses. El Ayuntamiento ya ha completado el proceso de adquisición de unos terrenos que bloqueaban el desarrollo de esta obra. Aunque no se demolerán las construcciones donde se ubica el estanco de Trassierra, si se desarrolla el plan urbanístico de la zona, esos edificios serían derribados, ampliando las aceras de la avenida.
La segunda fase de la reforma de la avenida de Trassierra se concluyó a principios de abril de este año, abarcando el tramo entre las calles Río Névalo y Francisco de Toledo. La primera fase, ya finalizada hace tiempo, incluye el tramo entre Río Névalo y la glorieta Amadora.
En los pliegos del contrato se explica que la carretera de Trassierra es uno de los ejes radiales históricos que penetran en el casco urbano y está clasificada como "vía primaria" por el PGOU. Actualmente, la calzada en el tramo a remodelar se encuentra en un estado lamentable, con las mismas características formales de cuando era parte de la red de carreteras de la Diputación.
Aunque la calzada no se ampliará, ya que se considera que el espacio es suficiente para la obra proyectada, sí se rehabilitará. También se trabajará en las aceras, que varían en tamaño según la zona y están bastante deterioradas debido a su antigüedad.