El Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA) ha confirmado la condena de 12 años de prisión impuesta a un hombre por la Audiencia Provincial de Córdoba tras ser declarado culpable de un delito continuado de agresión sexual agravada contra su sobrina-nieta. La sentencia de apelación desestima en su totalidad el recurso interpuesto por la defensa del acusado.
Agresiones sexuales prolongadas durante tres años
De acuerdo con los hechos probados en la sentencia, refrendados ahora por el TSJA, los abusos se produjeron de forma reiterada durante un periodo de aproximadamente tres años, comenzando cuando la víctima tenía 13 años y prolongándose hasta que cumplió los 16. La convivencia en el mismo domicilio familiar en Córdoba facilitó que el acusado, tío-abuelo de la menor, pudiera ejecutar los actos ilícitos.
El último episodio conocido tuvo lugar sobre las 14:30 horas del 20 de octubre de 2019, después de que la menor advirtiera al procesado que no volvería a su vivienda si persistía en su comportamiento abusivo.
Medidas adicionales: inhabilitación, alejamiento e indemnización
Junto a la pena privativa de libertad, el fallo dictado el 24 de julio de 2024 por la Sección Segunda de la Audiencia Provincial impone al condenado la inhabilitación absoluta durante el tiempo que dure la condena y una inhabilitación especial para ejercer profesiones u oficios que impliquen contacto habitual y directo con menores por un periodo de 19 años, superando así en siete años la duración de la pena de prisión.
Además, el tribunal estableció una orden de alejamiento que le prohíbe acercarse a la víctima o comunicarse con ella por cualquier medio durante 15 años, así como el pago de una indemnización de 20.000 euros para compensar los daños morales sufridos por la menor.
El recurso de apelación, rechazado por el TSJA
El procesado, a través de su defensa, recurrió la sentencia alegando, entre otros motivos, la supuesta vulneración de la presunción de inocencia. Sin embargo, el TSJA rechazó todos los argumentos presentados, considerando que la valoración de la prueba realizada por la Audiencia Provincial fue correcta, suficiente y ajustada a derecho.
El tribunal superior andaluz resaltó la coherencia y credibilidad del testimonio de la víctima, subrayando la ausencia de contradicciones relevantes a lo largo del proceso judicial. También destacó la importancia de los informes psicológicos, que acreditaron el impacto emocional de los abusos, así como el informe del Instituto Nacional de Toxicología, que corroboró aspectos relevantes del relato de la menor.
Protección a menores y contundencia judicial
La sentencia ratificada por el TSJA refuerza el mensaje de tolerancia cero ante los delitos sexuales contra menores y subraya la necesidad de proteger la libertad sexual de los más vulnerables. El tribunal también considera que la indemnización fijada es adecuada para compensar el grave daño moral causado a la víctima.
Aunque contra esta resolución cabe interponer recurso de casación ante la Sala Segunda del Tribunal Supremo, el fallo evidencia la firmeza del sistema judicial en su compromiso con la defensa de los derechos fundamentales de los menores víctimas de abuso.
