Los agentes de la Policía Local de Córdoba han decidido no participar en los servicios extraordinarios durante la Semana Santa, lo que pone en riesgo la seguridad de las procesiones. Cuatro sindicatos (UGT, CSIF, Sipan y Siplb) han anunciado que no realizarán refuerzos entre el Viernes de Dolores y el Domingo de Resurrección, una medida de presión ante la negativa del Ayuntamiento a actualizar el pago de las horas extra, congelado desde hace 25 años en 3,80 euros por hora.
Una plantilla insuficiente sin horas extra
Actualmente, el cuerpo cuenta con 280 agentes operativos, divididos en dos turnos de 140, que deben cubrir tres franjas horarias. Para garantizar la seguridad durante la Semana Santa, el Ayuntamiento requiere unos 70 refuerzos diarios, no solo para vigilar las procesiones, sino también para atender incidencias en los barrios, accidentes de tráfico y llamadas ciudadanas. Sin la disposición de los agentes a hacer horas extra, el plan de seguridad se desmorona, ya que estos servicios son voluntarios. Como referencia, en el dispositivo especial de la Media Maratón de Córdoba se solicitaron 85 refuerzos.
Los sindicatos advierten que, si no se cubren las necesidades de personal, la normativa podría obligar a suspender los cultos. "Sin estas horas extraordinarias, la seguridad en la calle no está garantizada", han advertido.
Tensión entre los sindicatos y el Ayuntamiento
El conflicto ha escalado tras una reunión celebrada este martes, en la que los representantes sindicales aseguran que la delegada de Recursos Humanos, Cintia Bustos, reconoció que el plan especial es adecuado a nivel operativo, pero que el Ayuntamiento no lo financiará por cuestiones presupuestarias. Los agentes consideran esta postura contradictoria, especialmente cuando el gobierno municipal ha anunciado un superávit cercano a los 40 millones de euros.
En un comunicado, los sindicatos han sido muy críticos con el equipo de gobierno, al que acusan de "falta de ética" y de actuar con "prácticas manipuladoras" para evitar la negociación del pago de las horas extra. Especialmente duros han sido con Bustos, a quien señalan por haber solicitado a los sindicatos la elaboración de un plan de seguridad, solo para luego ignorarlo al ver que suponía un gasto económico.
“La relación con Recursos Humanos está completamente corrompida por niveles insoportables de falsedades y manipulaciones. La comunicación con el Ayuntamiento se ha convertido en algo tóxico y nada confiable”, denuncian.
El Ayuntamiento insiste en su voluntad de diálogo
Desde el gobierno municipal, fuentes oficiales han respondido asegurando que "la voluntad de negociar sigue intacta" y que mantienen "la mano tendida al acuerdo". Sin embargo, hasta el momento, no han planteado ninguna oferta que permita desbloquear la situación.
Con la Semana Santa a la vuelta de la esquina, el pulso entre la Policía Local y el Ayuntamiento deja en el aire la seguridad de una de las festividades más importantes de la ciudad.