Alrededor de medio centenar menores y una veintena de voluntarios y voluntarias participan desde esta semana y durante todo el mes en la sede de Cruz Roja en Córdoba en la segunda fase de la Escuela de Verano promovida un año más por la institución humanitaria.
El programa planteado por el voluntariado de Cruz Roja Juventud contempla una gran variedad de actividades lúdico-educativas, incluidas varias excursiones cada semana, y habrá una pausa a media mañana en la que se ofrecerá un desayuno a los menores, en su mayoría niños y niñas procedentes de familias en situación de vulnerabilidad que son apoyadas por la propia entidad.
La temática central en esta ocasión gira en torno a la diversidad, bajo el lema ‘Construyamos juntos un mundo diverso’.
Al igual que ocurrió en julio, el voluntariado de Cruz Roja juventud realizará esta labor -para la que cuenta con financiación de Unespa (Asociación Empresarial del Seguro)- en su sede, de lunes a jueves entre las 9:30 y las 13:30.
“Es un gusto ver cómo, año tras año, hay jóvenes que, en vez de irse a la piscina o quedarse en casa jugando a videojuegos, deciden dedicar sus mañanas a venir a Cruz Roja para tratar de hacer algo más divertidas y felices las mañanas de los menores que participan en la Escuela”, destaca Ángela Almoguera, técnica de Cruz Roja Juventud.
Como novedad, este año la organización ofreció, además de los dos meses de Escuela de verano, un servicio de ludoteca en la última semana de junio para familias en situación de vulnerabilidad con problemas de conciliación.
Cruz Roja Juventud es la sección juvenil de Cruz Roja Española, y está integrada por menores y jóvenes con edades comprendidas entre los 8 y los 30 años. Por medio de sus cuatro áreas de acción, realiza actividades que intentan promover el cambio social desde la infancia y la adolescencia, en busca de una sociedad plural, tolerante, solidaria y respetuosa.
