La implantación de la nueva plataforma digital del Ayuntamiento de Córdoba ha desatado una oleada de críticas tanto desde la oposición como entre los propios ciudadanos. Tras semanas de quejas por incidencias técnicas y fallos generalizados en el sistema, la delegada de Modernización Digital, Lourdes Morales, ha solicitado comparecer de forma voluntaria en el Pleno municipal, previsto para el mes de junio, con el objetivo de explicar el desarrollo de este controvertido proceso tecnológico.
Una plataforma digital envuelta en polémica desde su inicio
El nuevo sistema de tramitación electrónica, en funcionamiento desde el pasado 31 de marzo, ha generado numerosas dificultades, tanto para los empleados municipales como para la ciudadanía. Según distintas denuncias públicas, el servicio ha acumulado "cientos de incidencias", lo que ha provocado retrasos, bloqueos y una notable frustración entre usuarios y funcionarios.
Desde el equipo de gobierno, se ha minimizado el alcance de estas incidencias, argumentando que son normales en cualquier proceso de migración tecnológica de gran envergadura. Sin embargo, el malestar ha seguido creciendo y los problemas técnicos han sido calificados por los grupos de la oposición como un "colapso absoluto".
La oposición exige responsabilidades y dimisiones
Durante la última sesión plenaria celebrada este jueves, el ambiente se tensó tras las reiteradas críticas de PSOE y Hacemos Córdoba, que insistieron en la necesidad de depurar responsabilidades políticas. El portavoz socialista, Antonio Hurtado, denunció la falta de información y la escasa preparación del nuevo sistema, señalando directamente a Lourdes Morales por su gestión. "Esto es un caos digital sin precedentes. La ciudadanía se siente desatendida y los trabajadores municipales, desbordados", afirmó Hurtado.
Por su parte, Juan Hidalgo, portavoz de Hacemos Córdoba, acusó a Morales de "falta de capacidad" y tachó de oportunismo político su decisión de comparecer ahora, tras semanas de presiones. Ambos grupos habían exigido previamente la celebración de una sesión extraordinaria dedicada exclusivamente a esta cuestión.
Críticas cruzadas y tensión política en el Pleno
También se sumó a las críticas la portavoz de Vox, Paula Badanelli, quien negó que la comparecencia de Morales pueda considerarse voluntaria, dado que ya había sido solicitada por la oposición. "Después del desastre tecnológico que vivimos, es lo mínimo que puede hacer: dar la cara", apuntó.
Desde el Partido Popular, el portavoz Miguel Ángel Torrico salió en defensa de la delegada de Modernización Digital, considerando "desleal" que se intente forzar el debate antes de su comparecencia oficial. Torrico recordó además que "no era el momento de debatir aún este asunto" y comparó la situación con apagones digitales recientes ocurridos en otras administraciones para tratar de contextualizar lo sucedido en Córdoba.
Antecedentes: digitalización acelerada tras la pandemia
Cabe destacar que el Ayuntamiento de Córdoba se vio obligado a acelerar su proceso de digitalización tras el confinamiento de 2020. Hasta ese momento, la mayor parte de los trámites municipales requerían atención presencial. Fue entonces cuando, mediante un convenio con la Diputación de Málaga, se comenzó a operar con la plataforma de esta institución como solución temporal.
Tras varios años utilizando dicho sistema externo, el consistorio decidió en julio de 2023 desarrollar una plataforma digital propia, con la promesa de optimizar la atención ciudadana y modernizar la administración. No obstante, la implantación del nuevo sistema ha evidenciado carencias graves de planificación y ejecución, según denuncian los partidos de la oposición.
¿Qué ocurrirá en la comparecencia de junio?
Con la comparecencia fijada para el próximo mes, todas las miradas estarán puestas en Lourdes Morales y en su capacidad para dar explicaciones claras sobre la gestión del proyecto. Mientras tanto, crecen las dudas sobre si se podrán resolver los fallos técnicos a corto plazo y si el Ayuntamiento de Córdoba podrá recuperar la confianza de sus ciudadanos en un sistema digital que, por ahora, parece haber llegado antes de estar realmente listo.
