El caudal del río Guadalquivir a su paso por Córdoba ha descendido este miércoles a nivel de alerta naranja, gracias a una leve mejoría meteorológica. Sin embargo, la situación sigue siendo preocupante, ya que aún existe un riesgo significativo para las actividades en las márgenes del río.
Según los datos en tiempo real de la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir (CHG), la altura del agua en la capital cordobesa se sitúa en 2,45 metros, rozando el umbral de la alerta roja, que se activa a partir de los 2,50 metros.
Situación en la provincia y embalses
En la provincia, Almodóvar es el único punto donde se mantiene la alerta roja, con una lámina de agua que ha alcanzado los 8,16 metros, superando el umbral establecido en 6,8 metros.
Respecto a los embalses, la atención se centra en:
- Bembézar, en nivel naranja, con un desembalse de 372 metros cúbicos por segundo.
- Navallana, también en naranja, liberando 442 metros cúbicos por segundo.
- Guadalmellato, con nivel amarillo, soltando 238 metros cúbicos por segundo.
Mientras tanto, el caudal circulante en Fuente Palmera sigue en nivel rojo, con un flujo de 1.170 metros cúbicos por segundo, siendo el único punto con esta alerta. En Villafranca, en cambio, ha descendido hasta los 354 metros cúbicos por segundo.
Previsión meteorológica: una nueva amenaza
Aunque las lluvias han dado un respiro, la calma podría ser temporal. La Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) prevé la llegada de un nuevo frente el día 20, lo que podría empeorar la situación. A pesar de ello, de momento no se han activado alertas, ya que las precipitaciones esperadas en la capital no superarán los 9 litros por metro cuadrado el jueves.
Las autoridades siguen monitorizando la evolución del caudal y los embalses ante posibles cambios en los próximos días.