Los funcionarios de la prisión de Alcolea, en Córdoba, lograron interceptar un dron que intentaba introducir objetos prohibidos en el recinto penitenciario durante la madrugada de este jueves. El incidente ocurrió alrededor de las tres de la mañana, cuando el dispositivo fue detectado sobrevolando el módulo 10 con un cargamento sospechoso.
Gracias a la rápida intervención del personal de vigilancia, se evitó la entrega ilícita y se confiscaron 36 bellotas de hachís, cuatro teléfonos móviles y sus respectivos cargadores. Los reclusos presuntamente implicados fueron trasladados al módulo de ingresos para su posterior investigación.
Denuncias sobre la falta de recursos tecnológicos
Tras este suceso, el sindicato CSIF ha expresado su preocupación por la insuficiencia de medios tecnológicos en las prisiones para detectar y neutralizar este tipo de amenazas aéreas. La organización sindical advierte que la seguridad del centro se ve comprometida debido a la creciente sofisticación de los métodos utilizados para introducir contrabando.
Pese a las limitaciones, CSIF ha destacado la profesionalidad y eficacia de los funcionarios de prisiones, que lograron frustrar este intento con los recursos disponibles.
Exigencias del sindicato CSIF
El sindicato ha reiterado su demanda de mejoras en las condiciones laborales de los trabajadores penitenciarios, incluyendo:
- Reconocimiento como Agentes de la Autoridad para reforzar su protección legal.
- Modernización de los medios coercitivos, con la posible incorporación de dispositivos Taser en casos excepcionales.
- Formación especializada y adecuada para afrontar situaciones de riesgo.
- Dotación completa de personal en todas las áreas del centro.
- Retribuciones más justas acordes a la responsabilidad del puesto.
CSIF insiste en que este tipo de incidentes pone de manifiesto la urgencia de reforzar la seguridad en los centros penitenciarios, dotando a los funcionarios de herramientas más avanzadas para afrontar las nuevas amenazas.