Reproducimos el comunicado de Kamira:
Hacemos llegar nuestro pésame y consternación ante estos lamentables hechos. Toda Nuestra solidaridad con la familia del joven Álvaro.
Ahora bien, queremos dejar claro que por muy lamentable que sean los hechos ocurridos, ello en modo alguno justifica las manifestaciones que al grito de "asesinos" se han producido contra la comunidad gitana de Peal de Becerro, ni mucho menos el incendio de una de las casas de una de las familias gitanas que allí habitan, o las amenazas que han provocado que varias familias hayan tenido que alejarse provisionalmente del pueblo, por temor a las represalias, como nos informan desde la asociación Sinando Kali.
El presunto autor de los hechos está detenido y se ha puesto en marcha el mecanismo de la Justicia tal y como está previsto en nuestro ordenamiento jurídico, y no tenemos ninguna duda de que se realizarán todas las diligencias necesarias para el esclarecimiento de los hechos y para que el responsable o responsables de la muerte de Álvaro, reciba la respuesta adecuada conforme a la legislación vigente.
Dicho lo anterior, solicitamos al Gobierno Civil de Jaén, al Ayuntamiento de Peal de Becerro y a las Fuerzas y cuerpos de seguridad que en el ejercicio de sus funciones adopten todas las medidas necesarias para proteger a las familias gitanas que residen desde hace muchos años en Peal de becerro como unos vecinos más, y que las que han salido del pueblo por temor a las represalias puedan volver a sus casas y que se restaure la convivencia pacífica.
Igualmente queremos pedir a los medios de comunicación, que no se utilice la desgraciada pertenencia del presunto homicida a la comunidad gitana para la estigmatización de toda esta comunidad. La sociedad gitana es amplia, diversa, plural y con valores a los que repugnan este tipo de actos delictivos, que condenamos con contundencia, de la misma manera que el resto de la sociedad española.
Debemos evitar, entre todos, que este desgraciado incidente sea utilizado por los incitadores del discurso del odio contra la comunidad gitana, dando lugar a diversos y desafortunados comentarios en distintos medios, como estamos observando con profunda preocupación, por la repercusión de los mismo contra toda la comunidad gitana.
Es tarea de todos defender los derechos fundamentales, y entre ellos el derecho a la vida, como igualmente es un derecho fundamental el derecho a la igualdad y el derecho a no ser discriminado por la pertenencia a una etnia determinada.
Por todo ello pedimos el compromiso de toda la sociedad, y en especial en estas circunstancias, el compromiso de los medios de comunicación en la defensa de estos derechos fundamentales, que nos competen a todos.
