La estación de autobuses de Córdoba reabrió sus puertas tras ser precintada y cerrada durante poco más de una hora debido a un aviso de un objeto sospechoso, una maleta, en las inmediaciones. La medida provocó que durante varios minutos los autobuses no pudieran entrar ni salir, impidiendo también el paso de peatones y bicicletas. En el lugar se vivió un momento de desconcierto y muchas preguntas, pero afortunadamente no se produjeron incidentes.
Casi a las 12.00 horas, la Policía Nacional comenzó a permitir nuevamente el paso al tráfico y la estación fue retomando poco a poco su actividad habitual, aunque con vigilancia reforzada y algunos retrasos en ciertos autobuses. En cuanto a los horarios, solo un autobús que cubre la ruta con Palma del Río quedó afectado, según informó la estación. Los demás servicios pudieron retomar su circulación después de esa hora.