jueves. 25.04.2024

El Centro de Análisis y Prospectiva del Turismo de la Universidad de Córdoba (CAPT) ha presentado esta mañana una encuesta sobre la demanda del subsector hotelero cordobés para pronosticar sus comportamientos futuros y hábitos de consumo en hoteles tras la fase de recuperación de la crisis generada por el COVID-19. El estudio ha sido realizado por las profesoras de la UCO Maribel Rodríguez Zapatero y Leonor Pérez Naranjo a instancias de la Asociación de Empresarios de Hospedaje de Córdoba (AEHCOR). 

El presidente de AEHCOR, Félix Serrano, ha manifestado su agradecimiento a la UCO por este estudio que servirá para “sentar las bases de lo que hemos de hacer a corto y medio plazo para  la recuperación del subsector hotelero tras la pandemia y la puesta en marcha de iniciativas de innovación, recualificación y mejora de los establecimientos hoteleros, particularmente en materia de seguridad higiénico-sanitaria y alimentaria, así como de agrupación colaborativa tanto interempresarial como público-privada para reforzar la capacidad de resiliencia de estos negocios frente a situaciones de crisis futuras que puedan producirse”. En este sentido, ha reseñado también que “por ello esta asociación ha firmado recientemente un convenio de colaboración con el Palacio de Congresos de Córdoba (PCC) para el impulso de actuaciones conjuntas en materia de promoción del turismo de congresos, reuniones e incentivos de empresa, como también el año pasado se firmó otro con la Universidad de Córdoba”.

En la provincia de Córdoba, al igual que en otros territorios nacionales e internacionales, los establecimientos hoteleros en el año 2020 han afrontado una crisis muy severa a consecuencia de la COVID-19. En concreto, en la provincia de Córdoba, durante los primeros once meses de 2020, el promedio mensual de los principales indicadores del sector hotelero fue el siguiente (Figura 1):

  • El número de establecimientos hoteleros abiertos se redujo a 108, un 46,7% menos que en 2019, cuando abrieron de media 203 establecimientos.
  • El número de plazas disponibles cayó hasta 6.918, un 38,8% menos que en 2019, cuando los clientes tenían a su disposición 11.313 camas.
  • Se ocuparon solo el 20,6% de las 6.918 camas disponibles, es decir, se ocuparon 1.427 plazas, lo que supone un descenso de las plazas ocupadas del 74,2%. En 2019 se ocuparon el 48,83% de las 11.313 plazas que ofertaron los establecimientos hoteleros, es decir, se ocuparon 5.524 camas.
  • Los 29.724 viajeros hospedados en establecimientos hoteleros realizaron 52.461 pernoctaciones, un 69,4% menos que en 2019, donde la cifra fue de 171.309.
  • En los establecimientos hoteleros trabajaron sólo 578 trabajadores, un 57,3% menos que en 2019, donde trabajaron 1.534 empleados. Es decir, en 2020 solo ha trabajado un 42,7% de la mano de obra del año anterior. O dicho de otra forma, con respecto a 2019, en 2020 han perdido su empleo, en promedio mensual, 773 personas.

Figura 1. Descenso de indicadores clave en los establecimientos hoteleros de Córdoba en el año 2020 con respecto al año 2019. Fuente: Elaboración propia, a partir de datos del Instituto Nacional de Estadística (2020). 

Encuesta sobre la demanda hotelera potencial

En la radiografía realizada a la demanda hotelera potencial, se ha partido de una encuesta a 450 turistas residentes en España. Los resultados muestran que la relajación de las restricciones de viaje para hacer frente a la COVID-19 no lleva a todos los clientes de vuelta a los hoteles de manera inmediata. Existe un pequeño grupo de clientes (un 10%) que, a no ser que las restricciones de movilidad se lo impidan, está dispuesto a salir de viaje y a alojarse en establecimientos hoteleros sin necesidad de que estos establecimientos tomen precauciones de seguridad adicionales frente a la COVID-19. 

No obstante, la mayoría de los clientes (78%), a pesar de que no haya restricciones de movilidad, no está tan predispuesta a viajar y alojarse en un hotel, puesto que necesita que estos establecimientos tomen medidas adicionales de precauciones de seguridad ante la COVID-19. Asimismo, un tercer grupo de clientes (un 12%) no está dispuesto a salir de viaje y alojarse en hoteles, independientemente de las medidas adicionales frente a la COVID-19 que lleven a cabo los establecimientos hoteleros, puesto que no se van a sentir cómodos hasta que la vacuna COVID-19 esté ampliamente disponible o hasta que el destino al que quieren viajar tenga muy pocos casos de COVID-19 y tenga la capacidad de testar, rastrear y aislar casos de COVID-19. 

Según los datos recabados, las precauciones de seguridad más importantes que los clientes esperan de un hotel durante la pandemia de la COVID-19 son, por este orden, las siguientes: que haya una limpieza más rigurosa y frecuente de superficies de alto contacto en áreas comunes (4,62, en una escala de 1 a 5), que las mesas y asientos estén separados para asegurar una distancia física mínima en áreas comunes, restaurantes y bares (4.57), que los empleados usen mascarilla en todo momento (4.57), que se limpie con desinfectante las instalaciones del restaurante (mesas y sillas) (4.54), que los empleados sean meticulosos en el lavado y desinfección de manos (4.53), y que los empleados conozcan los protocolos de salud y seguridad (4.50). En general, se trata de medias básicas de prevención ante la COVID-19.

Los establecimientos hoteleros son lugares en los que se produce un alto grado de interacción entre los clientes y los empleados. En consecuencia, es necesario prestar atención al alojamiento de los clientes, los servicios que lo acompañan (como limpieza o alimentación y bebida, entre otros), y las interacciones entre clientes, entre empleados y entre clientes y empleados (OMS, 2020b). Las medidas de prevención son cruciales, no sólo para ayudar a frenar la pandemia, sino también para que muchos clientes se sientan cómodos y seguros a la hora de alojarse en este tipo de establecimientos. En esta coyuntura, las ayudas directas para establecimientos hoteleros de gestión familiar, de gama media o baja y pertenecientes a micropymes o pequeñas empresas, que son en Córdoba una buena parte del tejido empresarial, se hacen sumamente urgentes para afrontar los numerosos gastos que tienen que acometer en cuanto a medidas de seguridad higiénico-sanitaria y alimentaria y adaptación de sus establecimientos a las nuevas exigencias de la demanda.

Una encuesta de la UCO revela la necesidad de reforzar las medidas sanitarias en los...