La Emergencia Climática exige la puesta en marcha con carácter inmediato de medidas de mitigación de emisiones y de adaptación de las ciudades al incremento de temperaturas. Sin embargo, el Ayuntamiento de Córdoba no dispone aún de un documento aprobado que guie la acción del municipio en este contexto. De esta manera se está dilatando la adopción de medidas urgentes para la mitigación de impactos del clima y la adaptación de la ciudad al mismo.
El Plan municipal contra el Cambio climático, documento que debería resolver esta ausencia de una guía estratégica, no estará aprobado definitivamente hasta bien entrado el otoño. De este modo, se nos escapa un tiempo precioso en vista de la situación de extrema sequía y altas temperaturas que enfrentamos. El grupo de trabajo sobre CC del CMMA entiende que esto no debe suponer que se paralicen todas las iniciativas detalladas en el mismo, pues buen número de ellas no tienen carga presupuestaria o pueden ser desarrolladas por los departamentos en el marco de las funciones que tienen atribuidas con el presupuesto ordinario. Por ello, el grupo de trabajo sugiere que esas iniciativas se podrían estar tramitando ya. No obstante, entramos en una etapa de una cierta paralización de la actividad municipal provocada por el impasse que provocará necesariamente la convocatoria electoral. A esta circunstancia se sumará el retraso que se derivará de la incorporación de los concejales delegados y la puesta al día en las tareas que se les encomienden y finalmente el ralentí propio del periodo vacacional que afecta, lógicamente, a todos los servicios.
El Grupo de trabajo sobre Cambio climático del Consejo municipal de Medio ambiente entiende que la puesta en marcha del Plan Municipal no debe dilatarse, máxime si consideramos que tal y como dispone la Ley Andaluza de medidas frente al cambio climático de octubre de 2018 debería estar aprobado desde octubre de 2022, cuando muy probablemente no dispongamos del documento hasta bien entrado el otoño como decíamos antes.
En consecuencia el Grupo de trabajo entiende que es obligado que alguna figura dentro de la estructura del Ayuntamiento asuma la dinamización y coordinación de los trabajos de los diferentes departamentos, empresas municipales y organismos autónomos. Esta figura bien prodría ser la Comisión técnica municipal ante el cambio climático propuesta en la línea estratégica A1 de Gobernanza y coordinación interadministrativa que, coordinada desde la Delegación de Sostenibilidad y Medio Ambiente tiene como función, entre otras, realizar “el seguimiento y evaluación de la ejecución de estas medidas -las desarrolladas en el Plan muncipal- y de los efectos alcanzados”.
En consecuencia con lo anteriormente expresado este órgano de participación solicita que la Delegación de Infraestructuras, Medio ambiente y Sostenibilildad asuma la convocatoria de esta Comisión técnica para impulsar todas aquellas medidas que pueden implementarse independientemente de la tramitación del Plan municipal por estar dentro del ámbito de competencias de las diferentes Delegaciones, empresas y organismos autónomos y solicita igualmente que se convoque a todas las reuniones que mantenga esta comisión a una representación del Grupo de trabajo para que pueda estar informado y hacer aportaciones al trabajo de la misma.
