El presidente de Dcoop, Antonio Luque, ha denunciado un presunto fraude en el mercado del aceite de oliva en España, alertando sobre la venta de productos adulterados con mezclas de aceites más baratos, como orujo o girasol, bajo la etiqueta de aceite de oliva. En un encuentro con la prensa, Luque exigió a las administraciones nacionales y autonómicas que investiguen esta práctica, destacando que España, líder mundial en producción de aceite, necesita proteger la calidad de su producto.
"Estamos ante un problema grave que la Administración debe atajar con controles más rigurosos y trazabilidad efectiva del proceso", afirmó Luque, señalando que, aunque no tienen pruebas suficientes para acudir a los tribunales, existen "indicios sólidos". Además, recordó que este tipo de fraude fue controlado en Italia gracias a la trazabilidad, y lamentó que ahora se haya trasladado a España.
Rafael Sánchez, director general de Dcoop, se sumó al llamado para "limpiar la imagen del aceite de oliva" y fortalecer el liderazgo de España en el sector.
Bajada de precios en el horizonte
En cuanto a los precios, Luque explicó que la "gran bajada" del precio del aceite ya ha comenzado, aunque prevé que pueda seguir descendiendo hasta situarse por debajo de los cinco euros por litro en origen. Sin embargo, advirtió que esta evolución dependerá del consumo y la climatología, subrayando que la falta de agua y de infraestructuras hidráulicas ha sido la principal causa del encarecimiento.
Por su parte, Sánchez criticó que la distribución se haya "precipitado" al anunciar la bajada antes de disponer de suficiente producto en el mercado, aunque afirmó que ya se empieza a notar el descenso en los lineales.
Facturación récord en 2024
Dcoop prevé alcanzar una facturación de 1.600 millones de euros en 2024, lo que supone un incremento del 13,5% respecto a los 1.409 millones obtenidos en 2023. Además, Luque adelantó que la producción para la campaña 2024-2025 será de unas 150.000 toneladas, muy por encima de las 90.000 toneladas de la campaña anterior.
A pesar de las posibles tensiones comerciales internacionales, Luque se mostró confiado, afirmando que su mayor preocupación es cómo la Unión Europea y el Gobierno español defenderán al sector. "No me preocupan ni Trump ni los chinos, me preocupan los nuestros", concluyó.
