martes. 16.04.2024

Cruz Roja ayudó el pasado año a superar los problemas de drogodependencia de 279 personas en Córdoba, 130 de las cuales recurrían a los servicios de la entidad por primera vez o retomaban el tratamiento tras una recaída.  

Y una vez más, el perfil predominante en esas atenciones fue el de un varón de entre 30 y 55 años con adicción al alcohol –y en un tercio de los casos con dependencia también a la cocaína-. 

Del total de usuarios, 192 fueron hombres y sólo 87 mujeres, pese al paulatino aumento experimentado en los últimos años en demandas procedentes del sexo femenino.

Además, conviene destacar que se mantiene la tendencia al alza en las asistencias a alcoholómanos (consumidores esporádicos, pero sin capacidad de control) y el descenso en la edad de consumo detectado por los profesionales del centro ambulatorio de drogodependencias que Cruz Roja tiene en Córdoba. 

Dicho centro, en el que trabajan un médico, una psicóloga, una trabajadora social y un nutrido grupo de voluntarios y voluntarias, ofrece tratamiento integral ambulatorio a toxicómanos –empezando por la desintoxicación, pasando por la deshabituación y acabando con la integración social- y apoyo y asesoramiento de diverso tipo a sus familiares.

En el mismo se llevaron a cabo a lo largo de 2019 más de 7.500 intervenciones, entre la atención médica, la psicológica y la social prestada a los pacientes.

Los profesionales hacen un seguimiento médico y psicosocial, que contempla revisiones clínicas periódicas y terapias individuales y de grupo, así como diversos controles toxicológicos. 

En cuanto a la tipología de los casos tratados, las terapias más frecuentes durante 2019 estuvieron motivadas un año más por la dependencia al alcohol, muy por delante de la cocaína, el cannabis, la heroína y otras sustancias estupefacientes diversas.

Por otro lado, el área de drogodependencias de Cruz Roja –con financiación de la Consejería de Igualdad, Políticas Sociales y Conciliación- cuenta también con una unidad de desintoxicación hospitalaria, ubicada en el centro sanitario que la institución posee en Córdoba y que está orientada a personas con alta dependencia alcohólica o mixta.

Este recurso, que funciona desde 1989, ha alcanzado una duración media en el tratamiento inferior a los cuatro días de media por paciente, lo que minimiza los inconvenientes laborales que implican una terapia de esta índole. Durante el pasado año, el personal de la institución realizó 42 desintoxicaciones hospitalarias, cuatro veces más que en 2018, cuando se registraron tan solo una decena.

Cruz Roja ayudó a casi 300 cordobeses a superar los problemas de adicción en 2019