La provincia de Córdoba continúa en tendencia descendente en términos demográficos. Según la última Estadística Continua de Población publicada por el Instituto Nacional de Estadística (INE), correspondiente al primer trimestre de 2025, Córdoba ha perdido 4.168 habitantes en solo un año, lo que representa una caída del 0,5% respecto al mismo periodo del año anterior. Mientras tanto, el conjunto del país ha seguido ganando población, con un incremento del 0,9% que sitúa a España en los 49,1 millones de habitantes.
Este nuevo descenso deja a la provincia con 769.398 residentes a fecha de 1 de abril. Aunque los datos del INE son provisionales, la tendencia es clara y persistente: Córdoba se desangra demográficamente, tanto a nivel interanual como intertrimestral. Solo en los primeros tres meses de 2025, la provincia ha perdido 1.579 vecinos, lo que supone una bajada del 0,2%.
Uno de los factores más determinantes en esta evolución es el comportamiento de la población extranjera. Mientras que a nivel nacional el número de residentes foráneos creció un 5,4% en el último año (frente al 0,2% de la población nacional), en Córdoba ocurrió lo contrario. La provincia perdió un 1,9% de su población extranjera, pasando de 28.504 a 27.961 personas. Este retroceso de 543 residentes evidencia la baja capacidad de atracción del territorio para colectivos migrantes, que buscan destinos con mayores oportunidades laborales y desarrollo económico.
La falta de atractivo para los inmigrantes es doblemente grave, ya que este grupo suele presentar índices de natalidad más elevados, fundamentales para contrarrestar el envejecimiento de la población y la baja tasa de nacimientos entre los españoles. Córdoba, tradicionalmente ajena a las grandes corrientes migratorias, pierde así no solo población activa sino también potencial de crecimiento demográfico.
Por su parte, la población nacional en Córdoba tampoco mejora. En el último año se han perdido 3.625 ciudadanos españoles, lo que equivale a un descenso del 0,5%, alineado con la tendencia general de la provincia, pero a contracorriente de lo registrado a nivel estatal, donde la población nacional se ha mantenido prácticamente estable.
En el análisis por trimestres, la situación sigue sin dar tregua. Entre enero y abril de 2025, la caída poblacional ha sido del 0,2%, afectando tanto a nacionales (-0,2%) como a extranjeros (-0,4%). En contraste, España registró un crecimiento del 0,15% en este mismo periodo, sostenido exclusivamente por el aumento de población inmigrante (+1,4%), ya que la cifra de españoles apenas varió (-0,05%).
El declive demográfico de Córdoba se perfila así como uno de los grandes retos del presente y futuro inmediato. Las cifras del INE reflejan una tendencia estructural que pone de relieve la urgencia de adoptar medidas eficaces para revertir esta pérdida de habitantes, que no solo afecta a las estadísticas, sino también al dinamismo económico, social y cultural de la provincia.
