En Córdoba, al cierre de cada Mayo Festivo, se experimenta una especie de Día de la Marmota en el que se discute, año tras año, sobre los modelos de Cruces y Feria necesarios para mejorar estas celebraciones. La Fiesta de los Patios, aunque enfrenta problemas como el relevo generacional y la lenta incorporación de nuevos recintos, no genera tanto debate.
Las Cruces
En medio de la celebración de las Cruces, el alcalde de Córdoba, José María Bellido, anunció la creación de una comisión para evaluar y reflexionar sobre el modelo de esta fiesta. Desde la fuente de la plaza del Potro, recuperada tras actos de vandalismo, Bellido explicó que la comisión incluirá a todas las asociaciones y hermandades implicadas en la organización de las Cruces.
Uno de los problemas más significativos que han surgido con el tiempo en las cruces es la pérdida de su esencia debido a escenas de botellones y macrobotellones. Bellido hizo un llamado a la ciudadanía para reflexionar sobre este asunto, tras los incidentes de vandalismo en la plaza del Potro y la masificación de cruces en áreas como Santa Marina. Para el alcalde, es esencial "mantener una fiesta con las características de Córdoba, disfrutando en la calle, pero respetando la convivencia".
El modelo de las Cruces de Mayo es "participativo y abierto", según Bellido, quien señaló que es necesario encontrar formas de evitar problemas puntuales, como los aforos en ciertas plazas, y tomar medidas más efectivas para prevenir los botellones, colaborando y utilizando nuevas tecnologías.
"Los problemas están en determinadas cruces del Casco Histórico, como las de Santa Marina, la plaza del Cardenal Toledo o El Bailío", explicó Bellido. Para ello, se establecerá una comisión de Cruces. "No podemos permitir botellones en esa zona, que generan todos los problemas posteriores. El botellón debe estar prohibido y los organizadores de las cruces deben ser proactivos en evitarlo", enfatizó. También subrayó la importancia de vigilar la venta de alcohol a menores y el uso de herramientas tecnológicas para controlar los movimientos y aforos.
Recientemente, el Consejo del Movimiento Ciudadano (CMC) aprobó varias propuestas para mejorar las Cruces en su última sesión plenaria. Entre estas propuestas está "no permitir el consumo ni la venta de bebidas por litros ni por cubalitros", según Juan Andrés de Gracia, presidente del CMC.
El CMC también sugiere limitar el horario y el volumen de la música en las cruces, evitando tipos de música ajenos a la tradición, y programar actuaciones dentro de un horario prefijado y con sonido limitado. Además, propone evitar la instalación de cruces a menos de 300 metros entre sí, impedir más instalaciones en el Casco Histórico y negociar su distribución, autorizando solo una cruz por zona, y elaborar un plan de seguridad más riguroso.
Antonio Toledano, presidente de la Federación de la Asociación de Vecinos Al-Zahara, advierte del "fin de las fiestas populares de Córdoba" si se permiten barras sin control, ya que esto podría disuadir a las asociaciones de participar en el concurso municipal y optar por otras fórmulas para poner barras en la calle. Toledano también denuncia la indefensión de los residentes ante barras sin control, que solo buscan recaudar fondos, lo que genera molestias al vecindario, aglomeraciones, venta de alcohol a menores y botellones.
La Feria
Tras la celebración de la Feria, se ha convocado la comisión creada para buscar soluciones a los problemas detectados en la última edición y mejorar esta última cita del Mayo Festivo cordobés. En dicha comisión participan el Ayuntamiento, el Consejo del Movimiento Ciudadano, la Federación de Asociaciones de Vecinos Al-Zahara, la Agrupación de Hermandades y Cofradías de Córdoba y los caseteros.
El alcalde defendió que el espacio ocupado en la Feria está al máximo y que el único problema es el coste del montaje. Se está trabajando en un diseño que permita que la infraestructura se quede hecha a cota cero, con losa de hormigón, conexiones eléctricas y de saneamiento, lo que reduciría significativamente el coste del montaje de las casetas.
Alfonso Rosero, presidente de las Casetas Populares, y Charo Sánchez de Puerta, presidenta de la asociación de Casetas Tradicionales, destacan la necesidad de estructuras fijas en el recinto ferial para evitar los altos costes de montaje anuales. Rosero señala que instalar una caseta en El Arenal puede costar hasta 60,000 euros, mientras que Sánchez de Puerta eleva esa cifra a más de 100,000 euros.
El Consejo del Movimiento Ciudadano ha presentado 15 propuestas para mejorar la Feria, incluyendo la figura de un comisionado que trabaje todo el año, un nuevo plano del ferial con un centenar de casetas de al menos 400 metros y espacios de descanso, y control sobre el tipo de música y el volumen. También sugieren intensificar la vigilancia del montaje de casetas, definir el espacio como recinto ferial definitivo, y mejorar la accesibilidad, transporte público y zonas de aparcamiento.
Los Patios
La Fiesta de los Patios, Patrimonio de la Humanidad, también necesita reflexión para su futuro. Rafael Barón, presidente de la Asociación Claveles y Gitanillas, subraya que el aumento de los costos de mantenimiento, plagas, y altas temperaturas están dificultando la sostenibilidad de los patios. Barón insta a encontrar una fórmula de financiación que no comprometa la calidad de la fiesta y garantice el relevo generacional, advirtiendo que, sin estas medidas, la Fiesta de los Patios podría perderse.