viernes. 18.04.2025

La ilusión con la que despiertan cada mañana los cofrades cordobeses en estos días previos a la Semana Santa se está viendo empañada por unas previsiones meteorológicas poco alentadoras. Todo apunta a que una borrasca llamada Oliver marcará el arranque de las procesiones en Córdoba, con lluvias persistentes desde el Viernes de Dolores y al menos hasta el Lunes Santo.

Según la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), la lluvia hará acto de presencia de forma contundente desde el viernes, con un 80 % de probabilidad de precipitaciones en la primera mitad del día, bajando levemente al 65 % por la tarde. Aunque la esperanza de que algunos vía crucis puedan salir aún se mantiene, el margen es estrecho.

El Sábado de Pasión también se presenta complicado. A pesar de que se espera una jornada de sol y nubes, los modelos coinciden en que la probabilidad de lluvia alcanza el 95 %, amenazando la salida de tres cofradías y un grupo parroquial que tienen previsto procesionar ese día.

Las previsiones para el Domingo de Ramos no son mucho más optimistas. Se espera un día muy nuboso, con un riesgo de lluvia del 100 %, lo que podría deslucir el esperado inicio oficial de la Semana Santa cordobesa. Esta situación, lejos de mejorar, se mantendría también el Lunes Santo, cuando las precipitaciones seguirían cayendo con alta probabilidad.

En redes sociales, otros meteorólogos aportan matices a esta perspectiva. Antonio Delgado, en su cuenta de X, señala que el Sábado de Pasión y el Domingo de Ramos podrían experimentar una ligera mejoría hacia el final del día, aunque reconoce que es pronto para asegurar si será suficiente para permitir los desfiles procesionales. Para el Lunes Santo, el mayor riesgo se concentraría en la franja de tarde.

Por su parte, el meteorólogo jerezano Juan Antonio Salado se muestra algo más optimista en sus pronósticos. En sus publicaciones, rebaja la probabilidad de lluvia en Córdoba al 20 % para la tarde del Viernes de Dolores, y al 50 % durante el Sábado de Pasión. No obstante, coincide con Aemet en que el Domingo de Ramos será problemático, comenzando con un 90 % de riesgo de lluvias, aunque podría disminuir hasta el 60 % por la tarde.

Los datos más esperanzadores apuntan a una mejoría clara a partir del Jueves Santo, jornada en la que, según coinciden varios modelos, podría estabilizarse finalmente el tiempo.

Mientras tanto, la comunidad cofrade permanece atenta a cualquier cambio en la previsión, con la mirada puesta en los cielos y la esperanza intacta.

La borrasca "Oliver" pone en jaque el inicio de la Semana Santa en Córdoba