La Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil tiene unas funciones que son sobradamente conocidas por la ciudadanía, como la vigilancia del tráfico, la instrucción de diligencias por delitos contra la seguridad vial, la investigación de accidentes y los auxilios de todo tipo a los vehículos que circulan por la provincia.
Pero hay un cometido menos conocido que sin embargo es muy relevante, se trata de la elaboración de informes proponiendo medidas preventivas y mejoras en determinados tramos de las carreteras, con el fin de evitar siniestros viales y disminuir la lesividad de los usuarios.
Las deficiencias que observan los guardias civiles del Subsector de Tráfico de Córdoba durante sus servicios se comunican a la Jefatura Provincial de Tráfico, pero parece que no todos esos informes son tenidos en cuenta, como ocurre por ejemplo con los referidos al tramo entre los kilómetros 255 y 256 de la carretera N-432, en el término municipal de Córdoba, a pesar de que presenta una alta siniestralidad con más de veinte accidentes desde 2016 hasta ahora, con varias personas muertas y heridas.
Desde 2021 y en reiteradas ocasiones se han trasladado informes poniendo de manifiesto la necesidad de que en ese tramo de carretera se adopten una serie de medidas, como la modificación del asfalto para mejorar la adherencia de los neumáticos y la colocación de señalización para advertir a los conductores de la presencia de un tramo peligroso. Sin embargo, de momento no se han tenido en cuenta esas recomendaciones y mientras tanto siguen produciéndose accidentes, como el que tuvo lugar el mes pasado cuando un camión se salió de la vía y ocasionó graves daños en la valla protectora.
Pero no es el único tramo afectado, porque en la carretera N-502 a la altura del kilómetro 375’6, en la intersección con la carretera A-435, dentro del término municipal de Alcaracejos, también se han producido numerosos accidentes con varias personas heridas, el último hace menos de un mes, y aunque se ha mejorado parte de la señalización, lo cierto es que aún no se han instalado paneles direccionales ni señales luminosas nocturnas. Y algo parecido ocurre en el entorno del kilómetro 188 de la N-432, del término municipal de Fuente Obejuna, donde se han registrado varios siniestros viales con heridos de diversa consideración.
La Asociación Unificada de Guardias Civiles ignora a qué se debe esta situación y qué persona u órgano es el responsable de que no se estén adoptando las medidas necesarias, pero considera una falta de respeto al trabajo y los esfuerzos de los guardias civiles de Tráfico para que las carreteras de la provincia de Córdoba sean más seguras, y sobre todo una grave dejación de funciones en una materia tan relevante para la ciudadanía como es la seguridad vial.