El proceso realizado en el Juzgado Mercantil de Córdoba, resuelto este mes de marzo, ha permitido a un hombre quitarse la deuda que tenía de 23.340 euros y seguir viviendo en su casa.
El vecino declaró que “contaba con una buena situación económica, pero sufrió una drástica reducción de ingresos a causa de un problema en la columna, de la cual se tuvo que operar, y le impide a día de hoy trabajar”. A causa de este incidente tuvo que pedir una serie de préstamos para hacer a las facturas. Sin embargo, los ingresos empezaron a escasear y su pareja tampoco podía aportar así que la única solución que veían factible fue dejar de pagar las facturas.
Ante el miedo de perder su hogar acudió a la Asociación de Ayuda al Endeudamiento y los abogados sin ánimo de lucro le aconsejaron declararse insolventes y acogerse al proceso de Ley de Segunda Oportunidad.
Nada más empezar el proceso ya vieron la luz al final del túnel y es que se paralizaron cualquier embargo judicial y volvieron a usar cuentas bancarias con su nombre. “Si el deudor solo tiene como bien su vivienda habitual y no puede pagar lo hipoteca sobre ella, antes tenía que liquidarla en concurso de acreedores. Ahora, como ha sido el caso, tenemos la opción de pedir inmediatamente la exoneración de todos los créditos no hipotecarios y esperar a que la ejecución de la hipoteca se materialice más adelante. Así, el interesado puede vivir algunos meses más sin tener que afrontar gasto por alquiler con lo que puede ahorrar para empezar de cero con una mejor posición económica”, señalaba Pepe Domínguez, abogado de la Asociación en Córdoba.
Finalmente, al acogerse a la Ley de Segunda Oportunidad el cordobés ha quedado libre de la deuda de 23.340 euros y puede quedarse en su vivienda. Gracias a esta ley, ya son 46 sentencias conseguidas por la Asociación de Ayuda al Endeudamiento.