Un vecino del barrio malagueño de Puertosol iba paseando por la calle cuando empezó a escuchar unos gemidos provenientes de un contenedor de basura. Al asomarse al contenedor, vio que los gemidos procedían de un saco de escombros donde un perro había sido encerrado, según informa Diario Sur. Pese a que fue encontrado en muy malas condiciones, su recuperación es favorable.
El perro, bautizado como el héroe mitológico Ulises, era un cachorro de mastín español de entre 7 y 8 meses que se encontraba en estado terminal. El Grupo de Protección de la Naturaleza (Gruprona) de la Policía Local de Málaga acudió de inmediato al lugar.
Los agentes han abierto una investigación para intentar identificar al autor de los hechos que podrían incurrir en un delito de maltrato animal. La Sociedad Protectora de Animales y Plantas de Málaga, junto con el hospital veterinario Catycan, se ha hecho cargo de su recuperación que es favorable.
Según Carmen Manzano, presidenta de la protectora, "el animal estaba agonizando, casi sin sangre en las venas e infectado de pulgas, de garrapatas y de gusanos que se lo estaban comiendo por dentro y por fuera", pensando que no se podría salvar. Sin embargo, los veterinarios consideraron que, por su juventud, saldría adelante. A través de las redes sociales de la protectora, se puso en marcha una colecta para ayudar con los gastos del tratamiento.