martes. 19.03.2024

Las imágenes desoladoras que arrastra la pandemia por coronavirus también dan paso a actos generosos y de bondad. La historia de Juan José Segarra, capellán del Clínico de Valencia pone de manifiesto la empatía de muchos en tiempos tan difíciles.

Juan José ayudó a Salvador, un paciente de coronavirus que estaba ingresado en el hospital valenciano desde el 23 de marzo. Salvador, además de luchar contra el COVID-19 tuvo la dura noticia durante su ingreso del fallecimiento de su padre, también víctima del coronavirus. El riesgo de contagio no permite hacer velatorios, y Salvador estaba ingresado, por lo que no podría haberse despedido de no haber sido por el sacerdote. Era el único de su familia que no podía acudir, sus hermanos sí pudieron ir.

Juan José, amigo de la familia, grabó en vídeo el funeral del padre de Salvador para después mostrárselo y que se pudiera despedir. El hombre, afectado por el coronavirus, no pudo acudir al funeral de su progenitor, pero sí pudo participar de él, aunque fuese por vídeo y al día siguiente. Salvador quedó muy agradecido con el sacerdote por su acto. La tecnología desarrolla un papel clave estos días tan duros. 

Un sacerdote graba el funeral de un hombre para que su hijo pueda despedirse