viernes. 19.04.2024

Un preso en libertad condicional ayudó a una corredora de maratón a terminar la carrera, cuando esta comenzó a cojear por el dolor.

En una publicación de Facebook para un grupo de corredores, Carrie Kelley dijo que había corrido solo los primeros kilómetros de la maratón de Beaver Creek al sur de Salt Lake City el 3 de octubre cuando varias lesiones la alcanzaron, dejándola cojeando y con dolor.

"Luego, alrededor del kilómetro 4, escuché hablar y alguien corriendo detrás de mí. ¿Quién podría ser más lento que yo? Resultó ser un prisionero en libertad de trabajo", escribió Kelley en Run4fun, un grupo privado de Facebook.

"El encantador Fidel vio que necesitaba ayuda y vino a correr a mi lado el resto de la carrera", escribió en referencia a Fidel Ybarra, quien estaba entre los presos en libertad de trabajo ayudando con las operaciones del maratón.

Ybarra acompañó a Kelley durante los últimos 35 kilómetros de la carrera de los 42 en total.

"Durante esos 35 kilómetros, hablamos, nos animamos unos a otros a través del sol ardiente y la cuesta empinada y bromeamos con los alguaciles", escribió Kelley. "Sin su ayuda, no habría podido terminar".

"No estoy seguro de por qué comencé a correr con ella, pero creo que tal vez vi un poco de mí y de otros reclusos en la situación", escribió Ybarra. "Normalmente nos dejan en la parte de atrás y nos dejan a nuestra suerte".

"Me di cuenta de lo mucho que le gustaba correr, y sentí que no podía dejar que terminara el maratón sola", escribió. "No sabía que una vez que empezara a correr, 35 kilómetros después cruzaríamos la línea de meta. Podría haberme detenido y subido a la camioneta de trabajo con el oficial que nos seguía, pero algo me hizo seguir adelante. Sentí que en el final yo tenía más dolor que ella, pero la sensación de logro fue más de lo que puedo describir con palabras ".

 

Un preso en libertad condicional no dudó en ayudar a una mujer que cojeaba al terminar...