viernes. 19.04.2024

A principios de mayo nacieron más de cien tortugas carey en una playa de Pernambuco, Brasil. Un espectáculo natural como este siempre era seguido por decenas de curiosos, pero debido al confinamiento, las pequeñas tortugas se dirigieron camino al Atlántico sin prácticamente testigos. La situación crítica de la tortuga carey pone en valor este sensacional evento natural que invita a pensar en la recuperación de esta especie en peligro de extinción.

El espectáculo no se pudo seguir en directo, como suele ocurrir cada dos o tres años, cuando los huevos de tortugas carey (Eretmochelys imbricata) eclosionan en la playa de Janga y cientos de personas aplauden entusiasmadas. Esta vez un silencio natural reinó cuando las más de cien tortugas de esta especie en peligro de extinción salieron de sus huevos en una playa de Pernambuco, Brasil.

La naturaleza mostró toda su fuerza ante una escasa presencia humana por el confinamiento frente al coronavirus y la prohibición de celebrar actos masivos y por tanto, estar en la playa. Sin embargo, como se puede ver en el vídeo, sí que hubo quien pudo inmortalizar esta maravilloso espectáculo natural:

 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 

A força de algo maior se manifesta com a beleza da vida. É um sinal de que superaremos o atual momento. 97 tartaruguinhas nasceram na praia do Janga, no domingo (22) 🐢. . . Da última vez a praia ficou lotada com diversas famílias registrando a eclosão dos ovos e a ida das tartaruguinhas ao mar . . E diante das restrições por causa da pandemia de coronavírus, dessa vez famílias não puderam acompanhar, mas nossos técnicos da secretaria de meio ambiente, que fizeram todo acompanhamento do ninho, registraram e estamos disponibilizando aqui. ❤️ . . #paulistape #euvivopaulista

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La tortuga carey, de la familia de los quelónidos, que cuando nace tiene forma de corazón, es una especie que se halla en peligro crítico de extinción, según la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza. Su aspecto cuando es adulta es similar al de otras tortugas marinas: su cuerpo es plano y sus extremidades aptas para nadar, pero su pico es puntiagudo y la mandíbula superior sobresale. Como otras tortugas marinas, puede alcanzar entre 50 y 80 kg de peso y en sus largas travesías por el océano puede llegar a recorrer miles de kilómetros.

Esta especie no se puede reproducir hasta que la hembra no alcanza entre 16 y 40 años. A causa de las prácticas de pesca humana, las poblaciones de este animal se encuentran en peligro en todo el mundo. De hecho, en varios países, como China y Japón, son cazadas porque su carne se considera un manjar. Por si fuera poco, los caparazones de las tortugas carey, de fondo de color ámbar y con una combinación irregular de bandas claras y oscuras, son utilizados para confeccionar elementos decorativos.

Este masivo nacimiento de tortugas carey invita a pensar que el futuro de la especie podría ser mucho más halagüeño que en la actualidad. Aunque para ello será necesario que tomemos conciencia sobre la situación de peligro en la que se encuentra.

 

Nacen cerca de 100 tortugas carey en una playa de Brasil gracias a la cuarentena