María Cardoso, a sus 101 años, envió su currículum a una empresa cárnica en Promissão, Brasil. Su motivación es lograr independencia económica y poder comprar su vino. Su inesperada propuesta ha revolucionado las redes. Tal y como ha explicado el periódico argentino "Clarín", María no ha tenido una vida fácil, ya que empezó a trabajar con 9 años, razón por la que no sabe ni leer ni escribir. Recurrió a sus familiares para que le ayudarán a redactar su propio currículum, que posteriormente enviaría a través de su bisnieta, Pãmela.
La jefa de recursos humanos, Juliana Araujo, donde la anciana mujer solicitó empleo ha compartido su historia en su cuenta de Facebook admirando su capacidad de esfuerzo. Ha acompañado la imagen con un mensaje en el que figura María como mujer empoderada y de gran valentía. Pese a que no le han dado un puesto de trabajo, varias empresas vinícolas han contactado con la familia para enviarle botellas de vino de forma mensual.