jueves. 28.03.2024

El confinamiento por la pandemia de coronavirus, que está dejando encerradas en sus casas a millones de personas en todo el mundo, está sacando a la luz historias de lo más peculiares. Es el caso del relato de dos jóvenes neoyorquinos, Jeremy Cohen y Tori Cignarella.

Él, fotógrafo de la ciudad, se pasaba los días observando las azoteas y haciendo fotos de los edificios cercanos y de como sus vecinos llevaban la cuarentena, hasta que en uno de sus momentos de trabajo descubrió a Tori. Ella bailaba en su azotea, y en ese momento surgió el flechazo.

Jeremy quiso contactar con ella y lo hizo adaptándose a las circunstancias: a través de un dron, adjuntó en una nota su número de teléfono y le pidió poder hablar con ella para conocerla. De esta manera tan peculiar comenzó su relación, charlando horas y horas a través de mensajes.

La relación fue a más y la pareja decidió tener su primera cita, eso sí, a distancia. Para ello, cada uno desde su punto elegido: la azotea de ella y el balcón de él, recrearon una mesa similar con una comida para dos, y mediante una videollamada comenzaron a tener su peculiar primera cena juntos.

 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 

Quarantine Cutie, part 2. Her name is Tori (@toricigs) and she’s cute and kind 😌

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Pero para la segunda cita Jeremy quiso ir a más y verla en persona, así que para no saltarse las reglas del confinamiento por el COVID-19 volvió a recurrir a otra espectacular idea: introducirse en una burbuja de plástico para poder salir a la calle sin tocar nada y manteniendo la distancia de seguridad requerida. 

 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 

How to date a Quarantined Cutie, Part 3.

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Ambos pudieron pasear, con el fotógrafo en su burbuja de plástico, y volver a disfrutar de una inolvidable segunda cita. Ahora la historia de estos dos jóvenes en medio de un confinamiento está siendo compartida por millones de usuarios a través de las redes sociales que agradecen un poco de amor en plena pandemia.

La historia de Jeremy y Tori, dos jóvenes que se han enamorado en pleno confinamiento