Los trabajadores de los equipos de trasplante cardiaco del Hospital Universitario Virgen del Rocío celebran la llegada a los 500 trasplantes de corazón, gracias a la solidaridad de las familias que han donado sus órganos.
Desde que en 1991 se realizó el primer trasplante en el hospital, la cifra media por año ha aumentado hasta día de hoy, al mismo tiempo que la estancia media que requiere el paciente para el alta, ha disminuido. Estos datos se han dado a causa de los avances sanitarios tanto de fármacos como de técnicas, pero sobre todo a la generosidad de las personas donantes.
Cabe destacar la importancia de los llamados "corazones artificiales", los cuales se emplean en pacientes adultos con insuficiencia cardiaca que se encuentran en lista de espera para el trasplante. Esta técnica supone, por tanto, una esperanza para quienes poseen una patología grave y no pueden recibir un trasplante a corto plazo. Estos corazones artificiales, tienen también la función de puente a la recuperación de pacientes que han padecido un fallo cardiaco reversible a medio plazo.
