El proyecto puesto en marcha por la Unión Europea, Life Lobo Andalucía, que durante cuatro años ha estado trabajando en mejorar las condiciones y cambiar la percepción social de este animal en Sierra Morena, donde ha estado históricamente presente, no tendrá continuidad. La Comisión Europea aprobó durante la semana pasada los 29 programas Life para los próximos cuatro años y entre ellos no figura el lobo por ninguna parte.
El Life (vida en inglés) ha tenido una inversión de 1,6 millones de euros (920.000 aportados por la UE) y ha estado liderado por la Junta de Andalucía, aunque en él no solo ha participado la Junta, también han puesto su granito de aren asociaciones conservacionistas, cazadores, pastores y organizaciones agrarias. En la provincia de Córdoba se han desarrollado actividades de concienciación en 10 municipios diferentes de Sierra Morena.
A diferencia del arduo trabajo realizado con otras especies, como puede ser el lince ibérico, por los programas europeos, con el lobo no se ha buscado mejorar la población por la sencilla razón de que apenas quedan ejemplares en Andalucía; si es que aún queda alguno, no se trata realmente de una manada reproductora que garantice la viabilidad de una especie que, técnicamente, por definición, está extinguida en Andalucía. El objetivo del Life tampoco era reintroducir artificialmente el animal, sino cambiar la imagen negativa de una especie que ha sido perseguida y cazada hasta casi su extinción.
La última medida adoptada por el Life ha sido la constitución de la denominada Mesa del Medio Rural y Lobo en Andalucía, en la que están presentes la Junta de Andalucía, la asociación conservacionista WWF-Adena, los sindicatos ganaderos UPA y COAG, la Asociación de Pastores por el Monte Mediterráneo, la Federación Andaluza de Caza, colegios de veterinarios, oficinas comarcales agrarias, la Federación Andaluza de Asociaciones de Defensa Sanitaria Ganadera y la asociación de propietarios de cotos de Ateca. Asaja, que siempre ha mantenido una postura muy combativa en contra del lobo, no quiere participar en la entidad, que en teoría tendrá continuidad en el tiempo.
De hecho, la Asociación de Jóvenes Agricultores llegó a montar su propio programa "anti-Life". Mientras el plan oficial fomentaba una imagen del lobo alejada de los tópicos, Asaja vendía justo lo contrario. Su manifiesto en contra de la especie consiguió el apoyo político de 15 ayuntamientos, algunos de los cuales estaban también dentro del Life Lobo. Rafael Navas, secretario general de Asaja Córdoba, considera una buena noticia el cierre del Life Lobo Andalucía. "Esto era tirar el dinero", asegura, de modo que "lo valoramos positivamente, porque era un auténtico disparate".
Por su parte, la bióloga de WWF-Adena Yolanda Cortés, que ha trabajado en el Life Lobo durante estos cuatro años, se lamenta de la falta de continuidad de un plan que califica como "bastante satisfactorio puesto que se han hecho muchas actuaciones en el área de distribución del lobo".
