Uno de los principales temores de la pandemia era las consecuencias en el sector turístico. Concretamente en los hoteles de la provincia de Cádiz, se están registrando una temporada estival algo mejor de lo previsto, pero a pesar de ello, el verano 2020 será recordado por ser uno de los peores en decádas.
La ocupación hotelera en los principales núcleos de la población se situó en el 61% durante agosto, según los datos de Horeca, la patronal provincial de la hotelería.
Durante el mes de julio hubo una ocupación del 52,7%, esto muestra que los turistas han retrasado todo lo posible sus desplazamientos. Según el presidente de Horeca, Antonio de María Ceballos, "Estos datos habrían sido una catástrofe en una situación de normalidad. Pero en el momento en el que estamos, es para estar satisfechos poque demuestran que Cádiz cuenta con una clientela fiel", delcaró el presidente de la patronal de la hostelería.
Concretamente en Cádiz los hoteles cerraron agosto con el 63% de las plazas ocupadas, frente al 49% previsto inicialmente, pes a la caída de treinta puntos por debajo del 93% logado en el mismo mes de año pasado.
"Pensábamos que no íbamos a tener ni verano, pero hemos tenido un verano decente y esperanzador porque a provincia de Cádiz sigue siendo un producto demandado que da confianza y seguridad", destacó el presidente de Horeca.
De cara a este mes de septiembre, se prevé una ocupación del 30%. El presidente ve posible que se repita el comportamiento del mes de agosto y que las reservas de última hoa eleven la ocupación real en función de la evolución de la pandemia.
Por otra parte, Cádiz se ha erigido este año en uno de los puntales del turismo en España. En junio, sólo Madrid superó la provincia de Cádiz en número de visitantes y en junio logró el tercer lugar, sólo por detrás de Málaga y Baleares.
