La delegada territorial de Salud y Familias, María Jesús Botella, presidió la semana pasada el Consejo Provincial de Consumo en el que se integran las organizaciones de consumidores FACUA, ADICAE, la Asociación AUGUSTA y la Confederación de Empresarios de Córdoba (CECO) y donde se presentó balance de la actividad del servicio provincial durante el año pasado, “que registró un total de 759 reclamaciones y denuncias” ha puesto de manifiesto la delegada territorial.
El sector más reclamado durante el pasado ejercicio ha sido el de telecomunicaciones, con 174 expedientes, un 23, 2 por ciento del total. A continuación destacar el sector de suministros esenciales con un total de 86 reclamaciones (lo que supone el 11,33 por ciento); el sector de minoristas como tiendas o grandes almacenes con 83 reclamaciones (el 10,93 por ciento); servicios sanitarios con 55 (7,24 por ciento); hostelería y turismo con el 51 (6,71 por ciento).
En el apartado de la actividad inspectora, se han ejecutado 17 campañas de inspección, levantándose un total de 640 actas. Entre las campañas destacan la de venta y suministro a consumidores de mascarillas tipo EPI e higiénicas que “ha tenido como objetivo vigilar la adecuación del sector a la normativa vigente respecto a cualidades o características técnicas, como de la información obligatoria específica propia al consumidor, con lo que hemos pretendido evitar el fraude de los productos al declarar una categoría (y, por tanto, calidad) distinta a la que pudieran poseer y se han visitado un total de 31 establecimientos”, ha hecho hincapié la delegada territorial.
Por otra parte se han destinado 36.400 euros a dos asociaciones de personas de consumidoras y usuarias de Andalucía que han destinado dicho crédito a la financiación de actividades de formación, educación y divulgación, dirigidas a las personas consumidoras y usuarias, consistentes en cursos, jornadas, seminarios, talleres en materia de consumo, así como al mantenimiento de los servicios de asesoramiento o consulta, mediación y gestión de reclamaciones y denuncias en materia de consumo.
De igual modo, la Consejería ha concedido 87.637 euros a 17 entidades locales, incentivando el ejercicio de competencias en materia de consumo, apostando por la consolidación y ampliación de estos servicios e impulsando su accesibilidad para la ciudadanía en todo el territorio andaluz.
La delegada territorial ha recordado que “durante este año 2021 la Consejería de Salud y Familias tiene recogido en su plan de inspección la realización de 23 campañas, que comprenden controles, entre los que se incluye la tomas de muestras de productos, para comprobar el cumplimiento de las normas vigentes y, de este modo, garantizar y reforzar los derechos de las personas consumidoras”.
El mayor número de inspecciones está teniendo lugar en el sector servicios, en el marco de 7 campañas distintas, orientadas al control de diversos ámbitos del mercado que afectan a un gran número de personas consumidoras y usuarias, o en los que resulta necesaria una protección más intensa de sus derechos: control básico de establecimientos alimentarios, no alimentarios, mercados de abastos y empresas prestadoras de servicios, contratación a distancia a través de páginas web, vivienda, publicidad y prácticas comerciales desleales, sector de la banca, telecomunicaciones, y, a la vista de cómo se desarrolle la pandemia, compañías aéreas.
Por su parte, para el control de productos industriales se ha previsto la realización de 9 campañas, que incluyen la toma y análisis de muestras para verificar la seguridad de los productos, en las siguientes áreas: el control general de productos industriales, de juguetes, de artículos de puericultura (artículos para la alimentación líquida, chupetes y broches para chupetes), y de disfraces, caretas, máscaras y similares destinados a ser utilizados por niños/as menores de 14 años. También se está realizando una campaña de inspección de objetos con metales preciosos (contraste de garantía), y otra de mascarillas, y se va a participar en 3 campañas nacionales de inspección, la de planchas de pelo, la de prendas de vestir en cuya composición tenga al menos alguna fibra natural (algodón, lana, seda…..), y la de gomas de borrar con apariencia de alimento.
Finalmente, en el sector de los alimentos se van a desarrollar 7 campañas de inspección, donde debe destacarse, junto al plan de control general de la información y la calidad de alimentos, la participación en 6 campañas de inspección de carácter nacional: la de preparados cárnicos frescos ("burger meat", hamburguesas, longaniza, adobados, empanados...), etiquetado e identificación de especies; la de bollería y pastelería rellena identificada "con nata" y otras menciones incorrectas: presencia de nata/ preparado graso; la de miel monofloral y mil flores, verificación del etiquetado y parámetros de calidad; la de bebidas vegetales, etiquetado y composición; la de azafrán y pimentón, etiquetado, origen y composición (materias extrañas); y la de bollería industrial infantil.
