La consejera de Agricultura, Ganadería, Pesca y Desarrollo Sostenible, Carmen Crespo, ha mostrado su satisfacción por el “éxito” de los distintos programas y actuaciones que desarrolla la Junta de Andalucía para proteger especies en peligro como, por ejemplo, el águila imperial ibérica. “Proteger nuestra naturaleza supone apostar por la conservación y recuperación de nuestra fauna y flora”, ha apuntado Crespo, quien ha hecho hincapié en la especial atención que se debe prestar a los animales que están en peligro de extinción o seriamente amenazados. “Velar por estas especies también es construir Andalucía y supone otra de nuestras aportaciones fundamentales para la Revolución Verde”, ha aseverado.
Carmen Crespo ha participado esta tarde en la suelta de un ejemplar de águila imperial encontrado con diversas lesiones pero que, tras su paso por el Centro de Recuperación de Especies Amenazadas (CREA) de San Jerónimo (Sevilla), se encuentra actualmente en condiciones para volver al hábitat natural del término municipal de Utrera, donde se encontraba asentado antes del incidente.
En su intervención, la responsable de Medio Ambiente en Andalucía ha resaltado la “importante contribución” del Plan de Recuperación del Águila Imperial para conseguir que la Comunidad Autónoma “haya batido un récord histórico de ejemplares en 2020 al alcanzar las 123 parejas reproductoras, siete más que en 2019”. Crespo ha comentado que la vida del ejemplar de águila liberado hoy en Utrera es “un ejemplo del buen funcionamiento de los programas de recuperación y reintroducción de águila imperial que lleva a cabo el Gobierno andaluz” y de la importancia de las actuaciones que la Consejería de Desarrollo Sostenible realiza para asegurar, en la medida de sus posibilidades, el bienestar de estas aves. En concreto, esta hembra se crió en las Sierras de Carde- ña-Montoro (Córdoba) y se liberó en la provincia de Cádiz con el fin de reforzar la población reproductora del territorio. Posteriormente, la rapaz se trasladó a la provincia de Sevilla, concretamente al entorno de Utrera, donde se asentó y tuvo una cría.
Entre otros objetivos, el Plan de Recuperación del Águila Imperial Ibérica implica una vigilancia permanente de esta población amenazada. Para ello, la Junta está dotando a las aves de emisores GPS que permiten conocer su ubicación y, por tanto, facilitan su seguimiento en caso de necesitar asistencia. En 2020 se ha marcado con este tipo de dispositivo a más de medio centenar de águilas que habitan en Andalucía.
Actividad de la Consejería
Además del Plan de Recuperación del Águila Imperial, entre las actuaciones que se desarrollan desde la Consejería de Desarrollo Sostenible para preservar ésta y otras especies en peligro de extinción se encuentra también el Programa de Reintroducción de esta rapaz. Al respecto, Carmen Crespo ha explicado que desde el Gobierno andaluz se está trabajando con el fin de consolidar hábitats para el águila imperial en diversas ubicaciones como Doñana, las Sierras Béticas y la serranía de Cádiz.
Por otro lado, la Junta cuenta con equipos técnicos especializados implicados en la Estrategia Andaluza contra el Veneno y que luchan, además, contra la amenaza de posibles incidentes relacionados con disparos. La consejera ha puesto en valor “el papel fundamental que juegan en esta labor los agentes de Medio Ambiente” y el buen funcionamiento de la red de CREAs gracias a “la gran plantilla de veterinarios” que, como en el caso del águila imperial liberada, “logran la recuperación de ejemplares que se encuentran en situación crítica”.
A estas actuaciones se suman también los convenios entre la Consejería de Desarrollo Sostenible y propietarios de fincas encaminados a poner en marcha acciones que eviten la muerte de aves en los tendidos eléctricos.
