Agentes de la Guardia Civil y la Policía Nacional han llevado a cabo una nueva operación contra el tráfico internacional de hachís en el Campo de Gibraltar, realizando registros en las localidades de Algeciras, La Línea y San Roque. La organización estaba dedicada al robo violento de droga a otras organizaciones de narcotraficantes, el llamado “vuelco".
Según ha informado la Guardia Civil a Europa Press, se han desplegado 250 agentes en la operación, coordinada por el grupo de Coordinación del Narcotráfico (OCON) de la Guardia Civil y que cuenta con el apoyo de Europol. Hasta el momento se han producido ocho registros y 11 detenciones, entre ellas el líder de la banda.
Para realizar los “vuelcos”, la organización contaba con armas de fuego catalogadas como armas de guerra, siendo por ello considerada como la banda más importante y peligrosa detectada en territorio nacional en los últimos años. Durante la investigación han sido intervenidas y atribuidas a los investigados un total de doce armas de fuego -2 fusiles de asalto, 1 subfusil, 7 pistolas y 2 escopetas-, munición y cargadores, chalecos antibalas, dispositivos de geolocalización, cámaras endoscópicas.
La organización se dedicaba principalmente a asaltar a otras bandas para robarles el cargamento de droga, algo denominado como "vuelco". Tales robos de droga eran perpetrados de manera especialmente violenta, usando para su comisión armas de fuego.
Cabe destacar que en ocasiones hicieron uso efectivo de ellas, incluso con las armas de guerra, de gran potencial lesivo y destructivo, dejando tras su paso vehículos de otras organizaciones “acribillados” y llegando los impactos de numerosas “balas perdidas” a viviendas o establecimientos situados en la periferia del lugar del asalto.
Entre las detenciones practicadas destaca la efectuada al considerado jefe de la organización, el cual llevaba un año fugado de la acción de la justicia al tener pendiente una orden de ingreso en prisión. Esta persona fue reconocida e identificada por los investigadores en un reportaje emitido en televisión a finales de 2018 sobre narcotráfico en el Estrecho como la persona que, ocultando parte de su rostro tras una máscara, utilizaba el sobrenombre de “Maxi” y reconocía durante su entrevista ser el jefe de una organización dedicada al tráfico de drogas que portaba armas, robaba y asesinaba.
También se ha detenido a un joven de 22 años de edad, el cual fue identificado como uno de los autores materiales de alguno de los robos armados que ha perpetrado esta organización, y que fue ingresado en prisión tras cinco años en busca y captura por fugarse del centro de menores donde estaba cumpliendo condena por homicidio. Durante el registro de su vivienda se le ha intervenido una pistola y un subfusil de asalto.
